domingo, 8 de septiembre de 2013

Papa Francisco dedica emotiva carta a Gustavo Cerati

La madre del cantante leyó en un programa de televisión la misiva que el Sumo Pontífice le respondió al artista plástico Gustavo Masó, quien le escribió para pedir oración por su amigo que lleva tres años en estado de coma.
Hace tres años que el cantante Gustavo Cerati se encuentra conectado a un ventilador mecánico, luego que el 15 de mayo de 2010, después de un concierto en Caracas, Venezuela, sufriera un accidente cardiovascular, que hasta hoy lo tiene en estado de coma 
Pese al tiempo, el recuerdo de su talento y el cariño de los suyos se mantiene, por lo mismo las muestras de apoyo son regulares. Una de las últimas fue un tributo que algunos cantantes y amigos hicieron en un programa de televisión argentino, donde figuras como Fabiana Cantilo, Leo García, Richard Coleman, y el artista plástico Gustavo Masó, hicieron en honor del ex líder de Soda Estéreo.
Sin embargo había más: uno de los momentos más emotivos fue cuando su madre, Lilian Clark, habló por teléfono y contó que el Papa Francisco había respondido una carta que le había mandado Masó. En respuesta, el Sumo Pontífice le había pedido que rezara por su amigo y que le dijera a ella que estaba a su disposición.
Gustavo Masó, íntimo del intérprete de Ciudad de la furia, envió la misiva el 20 de agosto y el 28 de ese mes, el Papa Francisco le respondió. Esta es la carta que la madre de Cerati leyó en el contacto vía telefónica que tuvo con el programa Gracias por venir, gracias por estar:
"Señor Gustavo Masó, gracias por su carta del pasado 20. Me ayudó a reconectarme con Gustavo. Porque el acostumbramiento nos va archivando la vida. Y la vida sigue. Espera. Desaparece y vuelve a aparecer. El archivista más cruel es el olvido. Tenía razón nuestro Borges cuando nos decía que solo una cosa no hallé. Es el olvido. Si, desde Dios. Pero entre nosotros: el olvido existe y es cruel. Gracias por haber soplado las brisas de un recuerdo.
Le ruego le diga Lilian que me hace bien su testimonio, su valentía en seguir esperando y que estoy junto a ella. Es difícil decir algo frente a la relación tan sagrada como es la de una madre con un hijo. Pero que acepte mi silencio hecho oración. Quedo a su disposición.
Por favor, le pido que rece por mí. Que Jesús lo bendiga y la Virgen Santa lo cuide.
Cordialmente, Francisco".

Texto tomado de: La Tercera

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